Hotel Washington Irving


La luna estaba llena, se reflejaba un círculo perfecto en el agua estancada de la fuente del naranjo, en las inmediaciones de la Alhambra. Corría una ligera brisa fresca inusual para el caluroso verano de Granada.

Sumida en un sin fin de pensamientos, mirando absorta el reflejo de la luna se hallaba Dafne. Una muchacha joven, tiene 22 años, la mente inquieta y todo el tiempo libre que se suele tener en las tardes aburridas de verano.Dafne dio el último trago de su lata de Coca-Cola, se levantó del banco en el que había estado meditando más de una hora y comenzó a andar con destino a casa.
Caminaba observándolo todo, su mirada se quedó quieta un momento mirando los arboles: ¿cuantos años tendrían todos estos árboles? ¿Cuantas historias habrán visto pasar? da igual…terminaría averiguándolo tarde o temprano. Tenía un espíritu aventurero... a veces en exceso.
Siguió caminando, varios metros más adelante giró la vista a la derecha, no pudo evitar fijarse en ese pequeño hotel abandonado y con pintas de ruinoso. Volvieron las preguntas a azotar su mente: ¿por qué está abandonado un hotel a los pies de la Alhambra? ¿Nadie quería explotarlo? En estos tiempos en los que el dinero lo mueve todo… a Dafne le extrañaba mucho que aquella mina de oro estuviera abandonada.
Siguió mirando hasta dar con el cartel estropeado en el que apenas se podía leer el nombre completo. Lo memorizó “Washington Irving”.
Huelga decir que en cuanto llegara a casa hurgaría en internet cualquier información que pudiera sacar de ese hotel. Los 20 minutos siguientes que duró la vuelta a casa los pasó entretenida pensando en el hotel.
  
Nada más llegar a casa fue directa a su habitación, apartó los folios con bocetos que se encontraban en el escritorio, coloco el ordenador entre todos los papeles que lo inundaban y lo encendió.
Normalmente, nada más encender el ordenador hacía ruta por las redes sociales, un vistazo a Facebook, twitter, tuenti… pero ésta vez era diferente, ésta vez se saltó ese paso abriendo directamente el buscador e introduciendo el nombre del hotel. Salieron varios enlaces con ese nombre en el contenido, noticias de prensa, fotos y varios comentarios de texto en foros donde más de un curioso se hacia las mismas preguntas que rondaban la mente de Dafne.
El primer enlace que abrió aparecía una comparativa de fotos del hotel en uso y en desuso. Las paredes eran de un blanco poluto, era un hotel humilde, no se respiraba lujo en ninguna habitación excepto una… la 507, la cual supuso que correspondía a la suite del hotel.
Después de un paseo virtual por el hotel ya abandonado, Dafne esperaba leer el motivo de su abandono, se había imaginado cientos de cosas y ninguna se aproximaba a la realidad. En esa página, aparte de fotos y comentarios del buen servicio, no había nada más que pudiera serle útil.
Volvió atrás, se quedó analizando cada enlace para elegir el tercero. Aquí la noticia empezaba hablando de una tragedia sucedida algún tiempo atrás. Contaba un asesinato ocurrido en circunstancias extrañas.




Continuará... 

3 comentarios:

  1. Ya espero la segunda parte juntamente con la contribución que solicitas al pie de blog :o) lo mismo te digo ;o)
    Enhorabuena por el blog,
    Saludos mil

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  2. Querid@ lector/a anónimo/a, agradezco tu sincera opinión sobre el texto. Pero me gustaría una critica más constructiva, una breve descripción de lo que no te gusta no estaría nada mal.

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